Jane Maas, la inspiración de Peggy Olson
Entre máquinas de escribir, whiskys y reuniones con clientes se desarrolla la agencia Sterling Cooper, de la serie de televisión Madmen, ambientada en el mundo publicitario de los años 60.
Los directivos de Sterling Cooper son Donald Draper, Roger Sterling, Salvatore Romano y Lane Pryce, seguido de ejecutivos también con nombre masculino. ¿Donde trabajan las mujeres de la agencia? Pues o bien como secretarias, o bien, como telefonistas, siendo Joan Holloway y Peggy Olson los personajes femeninos relevantes. Es una serie del género dramático que pretende relatar una realidad de la época, que quizás no completamente, pero sí que en gran parte sigue de actualidad.
Y es que en la serie los hombres siempre ocupaban cargos de ejecutivos o directivos, pero las mujeres nunca tenían este privilegio. A no ser claro está, que las mujeres se esforzaran mucho más en demostrar su valía y por fin se “ganaran” un lugar de aquellos reservados para los hombres.
Este es el caso de Peggy Olson, que pasó de trabajar de secretaria a ser la primera ejecutiva mujer de la agencia, no sin encontrarse dificultades por su género. La realidad es que este personaje estuvo inspirado en Jane Maas, publicista importante en nuestra historia. Jane, en un principio, quería trabajar como actriz, per por circunstancias consiguió trabajo de guionista de televisión. Con la experiencia que acumuló creó un portfolio y se presentó en la agencia Ogilvy & Mather, en la cual trabajaría como redactora copy durante 12 años. Finalmente, ascendería a directora creativa (la primera mujer directiva de la agencia).
En el año 2012 escribió Mad Women: la otra cara de la vida a Madison Avenue, una novela en la que narra las vivencias en la industria publicitaria de los años 60. En ella explica la brecha que existía en relación con los bajos sueldos que ganaban las mujeres, el machismo que sufría cuando clientes o compañeros la confundían con una secretaria, y cómo solamente le asignaban cuentas de marcas dirigidas a amas de casa, puesto que las publicistas tenían prohibido hacer anuncios sobre alcohol (“solo los hombres beben para ligar con mujeres”), automóviles (“las mujeres no saben conducir”) o finanzas (“los hombres llevan el dinero a casa”). Con esfuerzo y perseverancia (más de la que cabría que esperar de un hombre de la época) finalmente formó parte de una campaña para American Express, y no solo esto, sino que también fue creadora de la exitosa campaña I love New York, ya como directora creativa de la agencia Wells, Rich, Greene, curiosamente, también fundada por otra mujer: Mary Wells.
Así es como la vida de una publicista que aspiraba a ser actriz inspiró el personaje de Peggy a la serie Madmen: una mujer decidida, valiente y con mucha voluntad de triunfar.
imagen de portada cortesia adlatina.com